Protozoo ciliado, tomada de Wikipedia
Son organismos unicelulares, eucariotas que carecen de pared celular. Son heterótrofos fagótrofos (ingieren sus presas) aunque también los hay saprófitos y parásitos. Presentan características que los hacen parecer a los animales, como su capacidad de desplazamiento, su irritabilidad ante diferentes estímulos, el modo de captura del alimento y la complejidad de sus procesos digestivos. Algunos pueden formar colonias de varios individuos. Se alimentan por pinocitosis o por fagocitosis de bacterias, de algas unicelulares, de otros protozoos, de invertebrados microscópicos como los rotíferos o simplemente de partículas de materia orgánica presente en el medio.
Se clasifican según su modo de locomoción en cuatro grupos:
Ciliados
Tienen todo su cuerpo o algunas regiones cubierta de cilios (prolongaciones cortas). El movimiento de los cilios permite el movimiento de especies de vida libre como Paramecium, o generan corrientes de agua que transportan nutrientes en las especies sésiles como Vorticella o Stentor. La mayoría dispone de dos núcleos, uno para las funciones vegetativas y otro para la reproducción. A veces se producen intercambios genéticos por conjugación entre individuos.
Flagelados
Utilizan como medio de locomoción los flagelos (prolongaciones largas y poco numerosas). Como ejemplo tenemos Trypanosoma brucei, parasito que produce la enfermedad del sueño, cuyo vector es la mosca tse-tsé.
Sarcodinos
Emiten pseudópodos, estructuras que les sirven tanto para moverse como para capturar alimentos, alimentándose por fagocitosis. La mayoría son de vida libre y forman parte del plancton. Algunos tiene caparazón calcáreo, como los foraminíferos, y otros lo tienen de sílice, como los radiolarios. Las amebas carecen de caparazón y algunas son parásitas como el caso de Entamoeba histolitica, causante de la disentería amebiana en el hombre.
Esporozoos
Son inmóviles, parásitos y se dividen por esporulación. Como ejemplo tenemos Plasmodium, causante de la malaria o paludismo.